El Plan de Emiliana
Continuar fortaleciendo su labor como comadrona para ayudar a más mujeres.
Emiliana, comadrona en Guatemala
Labor ancestral: comadrona en Guatemala
Emiliana tiene 55 años. Desde hace 28 años es comadrona en su comunidad. Su plan es apoyar a más mujeres a tener un embarazo seguro y saludable.
Emiliana, desde pequeña aprendió la labor para ser comadrona. Su abuela, fue principalmente quien le enseñó las tareas básicas para atender partos y siempre le inculcó la importancia de aprender ese oficio. Su madre la orientaba, pues también realiza la labor como comadrona en Guatemala. Emiliana es madre de cuatro hijos y cuatro hijas; de las que espera, que también aprendan la labor y así seguir con el legado.
A los 55 años de edad, Emiliana, sigue brindando atención a mujeres, pero en especial a las que tienen entre 35 a 45 años de edad, son quienes más buscan de su atención. Algunas de las pacientes viven en su comunidad o son de otras comunidades aledañas al departamento de Baja Verapaz, Guatemala.
“Me gustaba salir con mi abuela, como ella era anciana. Me gustaba ayudarla, ella recibía a los bebés en las casas, porque hay señoras que no quieren ir al hospital y mi abuela los recibía, entonces, yo le ayudaba a lavar la ropa de sus pacientes, y así fue como empecé, «mi abuela me dijo: “así lo debes de hacer, ‘mija’, porque algún día te vas a quedar en mi reemplazo”», y era cierto, me quedé”. Emiliana, participante del Programa Generación Libre de Violencia, trabajo con comadronas.
“Me siento contenta y alegre al recibir una niña o niño. Cuando los recibo en mis brazos, es como si fueran míos”.
Emiliana, participante del Programa Generación Libre de Violencia, trabajo con comadronas.
Dignificar la labor de las comadronas en Guatemala
En Guatemala, hay un registro de más de 23 mil 500 comadronas inscritas en el Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social -MSPAS-, (marzo 2023). En la actualidad, el Decreto No. 22-2022, reconoce y dignifica la labor que realizan las comadronas en las comunidades para acompañar a la mujer embarazada en el trabajo de parto, orientar para que reciban los controles necesarios, promover la importancia de la lactancia materna y guiar en la planificación familiar.
“La gente me busca, aunque de noche, aunque esté lloviendo, tengo que ir porque hay señoras que están graves con la enfermedad, a veces presentan peligro en su embarazo, a veces tienen hemorragia y yo las llevo a la emergencia, si yo ya no puedo atender las tengo que referir al hospital”. Emiliana, participante del Programa Generación Libre de Violencia, trabajo con comadronas
Servicio de las comadronas en las comunidades de Guatemala
Las comadronas continúan siendo el primer punto de referencia de las mujeres embarazadas en las comunidades en Guatemala; siendo el vínculo entre la familia y el sistema de salud. Ellas son quienes identifican a mujeres embarazadas, orientan y aconsejan como cuidarse durante el embarazo. Además, recomiendan una alimentación sana, plantas medicinales de la región, e identifican posibles señales de peligro durante el embarazo. Y si es necesario, refieren y brindan acompañamiento al servicio de salud más cercano en su localidad.
Durante 28 años, Emiliana ha ejercido la labor de comadrona. Algunas madres no asisten a un centro de salud u hospital porque viven lejos y prefieren buscar el apoyo y atención de las comadronas dentro de su comunidad.
“Para mi significa ayudar. Hay pacientes que siempre están enfermas con sus embarazos, entonces, las voy a ver, se van con el doctor, pero también me buscan, yo les digo que es lo que deben tomar y qué van hacer”. Emiliana, participante del Programa Generación Libre de Violencia, trabajo con comadronas.
Para Emiliana, ser comadrona es ayudar, es brindar un servicio que apoye la salud de las personas de su comunidad. Se siente contenta de poder ejercer su labor; aunque enfrenta algunos retos. Por ejemplo; muchas veces ha tenido que atender algunos partos en horarios nocturnos o de madrugada, sin tener los medios para trasladarse a las casas de sus pacientes. En la mayoría de los casos estas comunidades son muy lejanas.
«Me siento contenta y alegre al recibir una niña o niño. Cuando los recibo en mis brazos es como si fueran míos»
Pasos para la atención de un embarazo
Paso 1
Para atender a una mujer embarazada, Emiliana realiza visitas mensuales para revisar el estado de salud de la madre y del bebé. En su visita, brinda recomendaciones para mantener una maternidad saludable. La refiere al puesto de salud más cercano para que lleve un control y que pueda recibir medicamentos.
“La primera vez que los voy a visitar, yo les mando en el puesto, les digo que tienen que estar en control, porque les dan sus prenatales, vitaminas, para que el niño nazca bien y nazca sano, porque si uno no toma vitaminas, los niños nacen desnutridos”. Emiliana, participante del Programa Generación Libre de Violencia, trabajo con comadronas.
Paso 2
Durante el parto, acompaña y asiste a la madre, recibe al bebé, corta el cordón umbilical; previamente, ha llevado a cabo las normas de higiene, esterilización de sus instrumentos y de manos, utiliza guantes, y prepara ahulados, gasas, toallas, entre otros insumos. Después, realiza una evaluación general del recién nacido, procede a tomar el peso, limpiar y vestir.
“Si yo recibo el bebé en la casa, yo llamo a la ‘seño’ y ellos van a vacunar al niño, al otro día de nacer, llegan las enfermeras que están trabajando aquí, gracias a Dios que ellas no han negado; aunque sea día sábado que recibo el niño, el día domingo mandan a alguien a vacunar al niño en la casa”. Emiliana, participante del Programa Generación Libre de Violencia, trabajo con comadronas.
Paso 3
Después del parto, Emiliana, informa a las autoridades del Ministerio de Salud del nacimiento del bebé para que reciba las vacunas necesarias y otro tipo de atención médica que necesiten ambos. Además, promueve la lactancia materna durante los primeros seis meses de vida, posterior recomienda la incorporación de alimentos nutricionales adecuados a la etapa del bebé. Les explica que es importante que consideren estás buenas prácticas que pueden prevenir que el recién nacido presente infecciones gastrointestinales, respiratorias u otras enfermedades. Además, que reduce el riesgo de mortalidad en el primer año de vida.
Acceso a información y formación
Emiliana, resalta la importancia de recibir información actual, para que las comadronas que ejercen la labor puedan atender, orientar y apoyar a las mujeres embarazadas en temas de nutrición, esquema de vacunas, higiene e identificación de señales de peligro. Resalta la importancia de promover “la planificación familiar”, ya que son temas que no tenía conocimiento antes de participar en los talleres de formación y que ahora, está consiente que la atención de partos debe ser atendida en espacios limpios y seguros, ahora cuenta con un kit básico de insumos para la protección y atención a las mujeres embarazadas.
“Plan International nos regaló una cajita de guantes, eso me sirvió mucho porque lo uso cuando yo recibo el bebé. Tengo mi tijera, los hiervo bien en la casa y cuando llego a la casa, lavo mis manos, bien lavaditas, después agarro al niño, después cuando ya nació el bebé, voy a cortar, entonces uso alcohol para que el ombligo no se infecte”.
Emiliana, participante del Programa Generación Libre de Violencia, trabajo con comadronas.
Desde el mes de junio del año 2023 hasta la fecha, Emiliana ha estado asistiendo mensualmente a los procesos de formación dirigido a comadronas, que Plan International Guatemala en alianza con el Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social, han desarrollado para fortalecer las capacidades de 706 comadronas en temas de atención al parto, identificación de riesgo para la prevención de muerte materna y neonatal. También, se trabaja en la incorporación de espacios amigables dirigido a adolescentes, jóvenes, padres y madres en la prevención de embarazos a temprana edad y salud integral.
“Como comadronas, es importante que nos capaciten, porque a veces a uno se le olvida, pero cuando nos capacitan, uno sabe cómo hacer su trabajo”. Emiliana, participante del Programa Generación Libre de Violencia, trabajo con comadronas.
“Plan International nos regaló una cajita de guantes, eso me sirvió mucho porque lo uso cuando yo recibo el bebé. Tengo mi tijera, los hiervo bien en la casa y cuando llego a la casa, lavo mis manos, bien lavaditas, después agarro al niño, después cuando ya nació el bebé, voy a cortar, entonces uso alcohol para que el ombligo no se infecte”. Emiliana, participante del Programa Generación Libre de Violencia, trabajo con comadronas.
Confianza entre la comunidad
Para Emiliana, es muy importante fortalecer la confianza con la comunidad. Sus pacientes la buscan de otras comunidades, aunque sea de noche o llueva, ella acude para atender a las madres, ya que, en algunos casos son embarazos con riesgo, por lo que ella, no duda y las atiende. En casos muy complicados prefiere referirlos al hospital, ya que considera que es importante que busquen atención médica.
“Gracias a Dios me aprecia la gente, como según el comportamiento, uno gana la confianza de la gente, siempre me agradecen”. Emiliana, participante del Programa Generación Libre de Violencia, trabajo con comadronas.
Categorias: Desarrollo de la primera infancia, Protección contra la violencia, Salud y derechos sexuales y reproductivos
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