«Vivimos en una miseria generalizada, esto nos afecta a todos», afirma Stephanie, una joven activista haitiana de 20 años del departamento sudoriental del país, que recientemente habló ante cientos de personas de distintas partes del mundo en un acto virtual de «Niñas en crisis» organizado por Plan Internacional.
Stephanie afirma que la vida en Haití es dura y que no le ha sido fácil salir adelante debido a la inestable situación que allí se vive. «Nuestro país ha atravesado un periodo de turbulencias, sobre todo en los últimos 10 años. Hemos tenido un aumento del desempleo, inflación y falta de oportunidades para los jóvenes».
El aumento del coste de la vida afecta a las familias
El aumento del coste de la vida se refleja en la subida de precios de alimentos básicos como el arroz, la harina, el azúcar y el aceite vegetal, que aumentaron más de un 63% en septiembre y un 88% en octubre de 2022, según un estudio de la Encuesta Nacional de Seguridad Alimentaria y Seguimiento Nutricional (ENSSAN 2022).
Esto tiene consecuencias devastadoras para la población. «El otro día, un niño que no podía ir a la escuela me pidió dinero para poder comer. Me dijo: ‘No tengo casa, vivo en la calle’. ¿Cómo puede ser? Quién se hubiera negado a ayudar a este niño, pero por desgracia en este país todo el mundo pasa necesidad», dice Stephanie.
Como muchos otros en Haití, Stephanie también lucha por sobrevivir. Vive con su padre y su hermana de 19 años. «Comemos una o dos veces al día y, cuando la sequía no destruye nuestro huerto, cosechamos lo que podemos. A veces pasamos un día sin comer, para evitarlo, incluso llegamos a comer plátanos antes de que estén maduros».
La violencia afecta el desarrollo normal de la vida y la economía
En septiembre de 2022 estallaron en Haití protestas y saqueos generalizados. Los bloqueos de carreteras paralizaron el país y los grupos armados se apoderaron de la principal terminal de importación de combustible, bloqueando los flujos de gasóleo, sustento de la economía. Esto supuso que los agricultores no pudieran llevar sus cosechas a los mercados cuando éstos estaban abiertos y no pudieran planificar los ciclos de siembra al no saber qué podrían vender de su cosecha antes de que se echara a perder.
«Los agricultores invierten lo poco que tienen para intentar rescatar sus cosechas y alimentar a sus familias. La gente invierte lo poco que tiene para vender sus cosechas con la esperanza de obtener algo de dinero a cambio, a pesar de las sequías y la escasez, pero ahora es prácticamente imposible circular por las carreteras de nuestro país porque están bloqueadas debido a las manifestaciones», explica Stephanie.
El sistema sanitario del país también se ha visto gravemente afectado, y algunos hospitales se han visto obligados a cerrar o a reducir el número de pacientes que pueden admitir debido a la falta de electricidad o de combustible para alimentar los generadores. La escasez hace que el personal sanitario no pueda ir a trabajar y que los hospitales tengan dificultades para adquirir medicamentos y suministros médicos.
«Los niños mueren de enfermedades que se pueden prevenir. Nuestro hospital local no funciona bien. El otro día, un amigo tuvo que ir allí y ni siquiera había luz. Un niño huérfano caminaba por los pasillos sin haber sido tratado por los médicos», dice Stephanie.
Stephanie ha participado en muchas actividades organizadas por Plan International a lo largo de los años y hace poco se unió a un club de ajedrez juvenil en el que ganó un concurso.
La Respuesta de Plan International en Haití
Actualmente aprende corte y confección, y Plan International apoya su crecimiento profesional financiando sus estudios. A pesar de ello, el acceso a la educación no es fácil, ya que la situación de seguridad ha obligado a cerrar algunos institutos de aprendizaje, a pesar de que debían comenzar las clases en septiembre.
«Desde muy joven he participado en la defensa de las niñas y las mujeres, y realizo actividades para ayudar a los jóvenes a encontrar su lugar en la sociedad, a integrarse en su comunidad y a hacer oír su voz», afirma Stephanie. «Siempre estoy pensando en el futuro, me gustaría montar mi propio taller de costura algún día para dar trabajo a chicas como yo».Acerca de la respuesta de emergencia de Plan International en Haití
Plan International lanzó una respuesta de emergencia a la crisis de hambre en Haití en julio de 2022 en el departamento del sudeste. Se distribuyeron transferencias de efectivo a más de 2.400 familias, ayudándoles a comprar alimentos y otros artículos de primera necesidad.
Durante 2023, estamos reiterando nuestro compromiso de apoyar a las familias necesitadas con la entrega de dinero en efectivo a 719 familias en el noreste del país. Además, también estamos celebrando charlas y talleres de formación sobre protección, nutrición e higiene en respuesta al reciente brote de cólera.
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