40 familias que viven en el departamento del sureste de Haití fueron las primeras beneficiarias de la transferencia de dinero en efectivo entregada por Plan International en respuesta a la crisis alimentaria en el país. Al menos el 90% de las entregas se hicieron a mujeres cabeza de familia. Se espera que la próxima distribución se lleve a cabo la semana siguiente para 373 familias.
Para seleccionar a las familias beneficiarias se realizaron visitas casa por casa y se evaluó el impacto de la falta de alimentos en sus hogares, priorizando a las mujeres embarazadas, madres lactantes, personas mayores o discapacitadas y familias con niños menores de cinco años.
Nuestra respuesta rápida incluye el apoyo a las comunidades para que accedan a los alimentos y al agua potable mediante transferencias de efectivo, el suministro de kits de almacenamiento de agua, tabletas de purificación y la mejora de los sistemas colectivos de agua. Además, trabajaremos en la protección de la niñez en contextos de inseguridad alimentaria y en la cobertura de las necesidades básicas en materia de higiene menstrual y promoción de los derechos sexuales, cuestiones que suelen ser invisibles en estos contextos.
Al menos, 4,3 millones de personas están en riesgo de inseguridad alimentaria aguda en Haití y necesitan ayuda urgente. El impacto de la crisis en las familias, niñas y niños también afecta a otros derechos como la salud y la educación, la explotación laboral y el trabajo infantil, la explotación sexual, los matrimonios tempranos y uniones forzadas, los embarazos precoces, así como el acceso limitado o nulo a la higiene menstrual.