“Lo que necesitamos ahorita es estudiar”
En los contextos de movilidad humana, donde los riesgos y la violencia son constantes, el acceso a la educación se vuelve sumamente difícil. Las oportunidades educativas son escasas, y las niñas, en particular, enfrentan una mayor exclusión debido a que están más expuestas a la violencia de género durante el tránsito. La educación se convierte en más que un derecho, es una herramienta que les permite tener un futuro distinto.
Sara*, es una adolescente de 15 años originaria de Honduras, que actualmente está en movilidad humana, y ha tenido que interrumpir su educación. Junto a su madre y sus hermanos se vio obligada a huir de su país debido a la violencia de las pandillas “La principal razón para salir fue la delincuencia ya no fue tanto por economía, sino por las pandillas”, menciona Sara.
Educación interrumpida por la violencia
Antes de salir de Honduras, Sara estudiaba y estaba cursando el segundo año de secundaria en Honduras. Sin embargo, su mayor preocupación desde que llegó a México ha sido la imposibilidad de continuar sus estudios. “Durante lo que he estado aquí, ya casi un año, no he podido seguir estudiando y para mi nivel académico ya tendría que estar en prepa, pero tengo que volver a secundaria, entonces me preocupa», comparte Sara.
“Durante lo que he estado aquí, ya casi un año, no he podido seguir estudiando y para mi nivel académico ya tendría que estar en prepa, pero tengo que volver a secundaria, entonces me preocupa»
Sara*, 15 años, hondureña
La educación en emergencias es vital para adolescentes como Sara, quienes se ven forzadas a abandonar la escuela. La posibilidad de retomar sus estudios les ofrece una sensación de normalidad, les brinda un espacio seguro y les permite continuar con su desarrollo personal. Sin embargo, para las niñas y adolescentes en situación de movilidad, el acceso a la educación es limitado.
Violencias en el camino
Además de los retos educativos, en su tránsito ha enfrentado diferentes peligros. “Cruzando para acá, nos agarró el crimen organizado, y pidieron dinero para poder soltarnos. Fue un momento de tensión para todos, porque estábamos en frente de mis hermanos, había más niños, mujeres embarazadas, y fue como un momento de pánico”, cuenta Sara.
“Cruzando para acá, nos agarró el crimen organizado, y pidieron dinero para poder soltarnos»
Sara*, 15 años, hondureña
Una vez en México, Sara y su familia han experimentado situaciones de violencia. «Hace poco estábamos en la casa donde vivimos y de repente empezó una balacera al lado de donde vivíamos. Fue revivir un poquito del pasado, y fue como un trauma que otra vez resurgió”, relata Sara.
Retomar la educación
“El principal objetivo para mí, es tener mi título que siempre he anhelado y mi graduación», menciona Sara. Para ella, alcanzar una carrera universitaria y graduarse de la escuela es su mayor aspiración. “Mi mayor plan es estar ya graduada y poder trabajar, tener estabilidad con mi familia”.
Sara y su familia llevan 11 meses en tránsito, casi un año desde que salieron de Honduras. Aunque su idea principal era llegar a Estados Unidos, ahora se están enfocando en regularizarse en México para que Sara y sus hermanos puedan retomar sus estudios. “Lo que necesitamos ahorita es estudiar. Ya sea aquí o en cualquier Estado, pero es lo que necesitamos ahora», comenta Sara.
“Lo que necesitamos ahorita es estudiar. Ya sea aquí o en cualquier Estado, pero es lo que necesitamos ahora»
Sara*, 15 años, hondureña
Sara conoció Plan International gracias a Médicos Sin Fronteras, quienes les brindaron apoyo durante su estancia en México. “Salió un apoyo por medio de Plan International, Plan trabaja con adolescentes. Me invitaron a talleres con otras jóvenes, y recibimos un apoyo económico que nos ayudó bastante en un momento que lo necesitábamos”.
Plan International México se dedica a brindar asistencia a niñas, niños y adolescentes en situación de movilidad, ofreciendo ayuda humanitaria y espacios educativos que fomentan su desarrollo integral. En la actualidad, la organización trabaja para garantizar que niñas, niños y adolescentes tengan acceso a la educación formal, promoviendo su inclusión en el sistema escolar.
*Nombre cambiado por motivos de protección.
Páginas relacionadas
